La CNMV pasa olímpicamente de la directiva MIFID II a tan sólo ocho meses de su entrada en vigor
Los trabajadores del sector financiero exigen a la CNMV que acelere las instrucciones para implantar la Directiva sobre Mercados de Instrumentos Financieros (MiFiD II) que, entre otras cosas, establece que la banca debe garantizar que su personal posea conocimientos y competencias para cumplir con sus obligaciones.
Para los empleados de banca, se está poniendo de manifiesto que algunas entidades «siguen sin entender que hay que corregir las malas prácticas de comercialización que generaron problemas en el pasado», y siguen sin dar instrucciones a la plantilla para que se asesore y comercialice de forma adecuada. Según CCOO, de hecho, los trabajadores deben recibir una formación más práctica en el área del asesoramiento y planificación financiera, algo que avala la directiva MiFiD II.
La CNMV, responsable de pautar las directrices para la evaluación de los conocimientos y competencias publicadas por el supervisor europeo ESMA (European Securities and Markets Authority) en marzo de 2016, no ha movido un dedo al respecto y, según fuentes conocedoras, hasta la fecha “no se ha manifestado sobre cómo se llevará a cabo».
De este modo, el próximo día 1 de enero de 2018 entrará en vigor la directiva 2014/65/UE del Parlamento Europeo y del Consejo de 15 de mayo de 2014, relativa a los mercados de instrumentos financieros (MiFID II) que exige a las empresas que a partir de esa fecha, todas aquellas personas que ofrezcan información y asesoramiento financiero a los clientes, acrediten sus competencias y conocimientos en esas materias.
Desde CGT ponen también el foco en la parte de la citada directiva que afecta a la plantilla, y que no es otra cosa que la formación que necesitan para acreditar las competencias exigidas. “Formación por otro lado que debiera ser, sin ningún lugar a dudas, computada como tiempo efectivo de trabajo”, señalan.
Y continúan: «Es competencia de la CNMV la transposición al ordenamiento jurídico español de la directiva, así como la fijación del marco regulatorio de la formación de los asesores y sus certificaciones. Lamentablemente a fecha de hoy, este organismo no ha hecho sus deberes. Peor aún, no tiene claro siquiera, si regulará una lista de certificaciones reconocidas o si publicará exclusivamente los criterios que estas deban tener».
Ante esta falta de regulación, las entidades financieras han procedido a fijar sus propios planes de formación, contratándola a distintas escuelas de negocios -Banco Santander a IE Business School, experta en formación online- que serán las que deban emitir las certificaciones oportunas”, explica mediante un comunicado interno la CGT.